miércoles, 24 de septiembre de 2025

CONTABILIDAD. PÉRDIDA DE CONTROL (II)

(…) 

B) Efectos consolidados de la pérdida de control.

 

El grupo debe cesar en la aplicación del método de integración global en la fecha en la que se pierde el control sobre la dependiente.

La norma obliga a poner a valor razonable la participación retenida y a incluir las ganancias o pérdidas que se pongan de manifiesto entre los resultados consolidados.

 

No obstante, la norma es muy confusa, por lo que se va a analizar el caso de dos puntos de vista.

 

1) PASO DE DEPENDIENTE A ASOCIADA.

 

Los ajustes en el balance consolidado a realizar son los siguientes: 

·         Se procede a poner a valor razonable la participación retenida, con abono a resultados de la sociedad tenedora.

·         Se reconoce como reservas de la sociedad tenedora las reservas en sociedades consolidadas desde su ingreso en el grupo (al cálculo a efectos consolidados), contra resultados de la misma

·         Se reclasifican como resultados de la sociedad tenedora de la participación retenida los ajustes por valoración contabilizados en el estado de ingresos y gastos reconocidos en las cuentas individuales. Y se reclasifica la participación retenida.

 

Los ajustes a realizar en la cuenta de pérdidas y ganancias son los siguientes. Recordando que ésta integra el 100% de los ingresos y gastos contabilizados por la sociedad dependiente entre la apertura y la pérdida de control (salvo los que tenga que reconocerse en otro estado): 

·         Reconocimiento de resultados de los ajustes por cambios de valor y las subvenciones pendientes de imputar. Dicha imputación se realiza en su totalidad, incluyendo la imputada a socios externos.

·         Calculo de los resultados por venta. Hay que calcular el valor razonable de la dependiente (el valor del patrimonio neto atribuido a la dominante más o menos el fondo de comercio o la diferencia negativa de consolidación). Y con ese valor se calcula el valor contable a efectos de consolidación para calcular los resultados por la participación venida y la valoración de la parte retenida. Una vez calculados, se practica un ajuste para sustituir por ellos el resultado reconocido en cuentas individuales por la vendedora, distinguiendo:

o   Resultado por la pérdida de control. La diferencia entre el valor razonable de la contraprestación recibida y el valor consolidado del interés vendido.

o   Resultado atribuido a la participación retenida. Diferencia entre su valor razonable y el valor contable consolidado.

Estos resultados se imputan a la tenedora, mientras que el beneficio de la venta de la participación y los ajustes por cambios de valor y subvenciones se atribuyen a prorrata entre la matriz y los socios externos.

 

Los ajustes en el estado de ingresos y gastos reconocidos son los siguientes: 

·         Como en pérdidas y ganancias, el 100% de los ingresos y gastos obtenidos por la dependiente entre la fecha de apertura y la pérdida de control. Los asientos reflejos de la cuenta de pérdidas y ganancias.

·         Se contabiliza un ingreso o gasto por transferencia de beneficios o pérdidas por el importe de los ajustes por cambios de valoración y subvenciones. Y transferencia de cualquier ingreso o gasto acumulados por la dependiente en este estado, como si se hubiera enajenado en ese momento los activos y pasivos correspondientes.

·         Diferencias con la Normativa Internacional de estados financieros NIIF 10 e IRFS 3. No son muy significativas:

o   Las normas internacionales no indican con precisión si el ajuste por revalorización debe practicarse únicamente a nivel consolidado o debe ser registrado en cuentas individuales. Aunque esta discrepancia no tiene mayor relevancia, al deber tomarse la segunda de las opciones.

o   No se transfiere a la cuenta de pérdidas y ganancias la totalidad de los saldos pendientes de transferencia, sino la participación de la matriz en ellos.

 

Los créditos, débitos y otros saldos pendientes entre las sociedades del grupo y la que abandona deben ir por sus normas respectivas. De tal manera que la fecha de pérdida de control se tiene por la de reconocimiento inicial de tales activos o pasivos, omitidos en los estados consolidados por partidas intragrupo. 

Los resultados internos obtenidos por otras entidades del grupo en operaciones realizadas con la sociedad que sale del mismo, se dan por realizadas, pero no los márgenes incorporados a activos vendidos por ésta última que se hallan en poder del grupo. La eliminación debe practicarse por el 100% de dicho margen no realizado. El elemento transferido debe quedar en el balance consolidado por el valor contable que resulte de tomar como coste inicial el precio pagado por el grupo en la fecha de su adquisición a terceros.

 

El registro contable de la pérdida de control:

·         Se dan de baja los activos (con el fondo de comercio o diferencia negativa), pasivos y socios externos.

·         A valor razonable la contraprestación recibida y la participación retenida.

·         Reclasificación de importes reconocidos en el estado de ingresos y gastos, a pérdidas y ganancias.

·         Cualquier diferencia debe contabilizarse como resultados en pérdidas y ganancias.

 

Los activos y pasivos de la dependiente que se dan de baja no están ajustados para eliminar el margen interno. Pero el valor de los socios externos que se da de baja se establece después de detraer del patrimonio de la dependiente el resultado no realizado frente a terceros. Consecuentemente, hay que imputar a resultados consolidados la participación de socios externos en dicho margen.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que cualquier diferencia en las operaciones con instrumentos de patrimonio propio deben reconocerse en reservas y no como ingresos o gastos. La baja de socios externos es una suerte de reducción de capital desde la perspectiva de la entidad que informa, en la que el socio que abandona la empresa se le entrega su parte proporcional en los activos y pasivos de la entidad.

  

2) PASO DE DEPENDIENTE A NO VINCULADA.

 

La inversión retenida debe considerarse un activo financiero disponible para la venta y ponerse a valor razonable de inmediato, con reconocimiento de los ajustes valorativos a través del estado de ingresos y gastos reconocidos. La participación debe reclasificarse y reconocer beneficios o pérdidas por la diferencia.

 

Hay que calcular el resultado por la pérdida de control. Teniendo en cuenta: 

·         La contraprestación recibida más el valor razonable de la inversión retenida,

·         Más los socios externos y menos el valor razonable de los activos netos.

 

La participación de socios externos en el margen interno no realizado queda integrado en el resultado

Se ha de considerar resultado el ajuste por el disponible por el tratamiento de permuta comercial al perder el control. 

Se reconoce como reservas de la sociedad que detentaba la participación la cantidad que habría figurado como reservas en sociedades consolidadas, de haberse mantenido la relación de dominio. 

Se ajusta el resultado por la diferencia. Teniendo en cuenta las eliminaciones de consolidación; obteniéndose el resultado reconocido en el balance consolidado.

Esa diferencia debería cargarse contra reservas de la vendedora, entendiendo que tiene origen en acciones en poder de socios externos (operaciones con instrumentos de patrimonio propio).

 

En pérdidas y ganancias. El resultado reconocido por la pérdida de control debe dividirse entre resultado por la enajenación de la dependiente y el asociado a la revaluación de la participación retenida. Teniendo como base el valor neto consolidado de la dependiente menos el interés de los socios externos dados de baja.

 

En el estado de ingresos y gastos reconocidos se hará un ajuste por la reclasificación de la participación retenida (asiento reflejo) y por la eliminación del resultado agregado en el individual por la participación vendida y reconocimiento del resultado consolidado por la parte vendida y retenida.

 

JIV

martes, 15 de julio de 2025

SISTEMA FINANCIERO. MERCADOS.

 

A) CONCEPTO Y FUNCIONES PRINCIPALES.

 

Se entiende por mercado financiero, el mecanismo o lugar a través del cual se produce un intercambio de activos financieros y se determinan sus precios. El sistema no exige la existencia de un espacio físico concreto en el que se realicen dichos intercambios. El contacto entre los agentes que operan en estos mercados puede establecerse de diversas formas. También es irrelevante  si el precio se determina como consecuencia de una oferta o demanda conocida y puntual para cada tipo de activos. En ocasiones es el emisor el que fija el precio del activo o título que lanza al mercado, de acuerdo con las condiciones generales existentes en el mismo, y es el mercado, con una demanda suficiente o insuficiente para dicho título, el que se encarga de señalar si el precio y demás condiciones de la oferta han sido apropiados.

 

Los mercados financieros cumplen las siguientes funciones principales:

 

Ø  Poner en contacto a los agentes que intervienen en los mismos, bien se trate de individuos o empresas que participan directamente en el mercado, bien se trate de agentes especializados o intermediarios financieros.

Ø  Ser un mecanismo apropiado para la fijación del precio de los activos. Se produce sobretodo en mercados de negociación. Para la fijación del precio en los de emisión se toma como referencia la situación del mercado respecto a los tipos de interés que se forman en el mismo.

Ø  Proporcionar liquidez a los activos, ya que en la medida en que se amplíe y desarrolle el mercado de un activo, se logrará una mayor facilidad para convertirlo en dinero sin pérdida.

Ø  Reducir los plazos y los costes de intermediación, al ser el cauce adecuado para el rápido contacto entre los agentes que participan en dichos mercados. Además, conviene que los costes de operación (comisiones y corretajes) sean bajos y que los mercados sean ágiles, es decir, que sea lo más corto posible el período de tiempo que media desde el momento que la operación se acuerda hasta que queda liquidada totalmente. Por otra parte, cuanto mayor sea el número de participantes en un mercado, menos posibilidades hay de que se puedan manipular los precios.

 

Cuanto mejor se cumpla este conjunto de funciones, mayor será la eficiencia de un mercado financiero.

 

B) CARACTERÍSTICAS.

 

Ø  Institucionales.

 

o   Transparencia. Un mercado es transparente cuando es posible obtener la información de un modo barato y fácil para los agentes que participan en él. Un mercado transparente significa un mercado integrado, sin departamentos estancos, no fragmentado.

o   Libertad. La libertad de un mercado viene determinada por la inexistencia de limitaciones para el acceso a él como comprador o vendedor, por la posibilidad de negociar activos en las cantidades deseadas y por la libre formación de precios. Un mercado libre no ha de presentar barreras de entrada o salida, no debe poner límites a los volúmenes de negociación y los precios deben formarse por el juego de oferta y demanda, sin influencias monopolísticas o de las autoridades.

 

Ø  Referentes a la oferta y demanda.

 

o   Profundidad. Un mercado es profundo cuando existen en él órdenes de compra y de venta por encima y por debajo del precio de equilibrio al que se negocia un activo en cada momento. De lo dicho se puede deducir que, cuanto mayor sea el número de demandantes y oferentes, más profundo es el mercado y menores oscilaciones se producirán en los precios o cotizaciones.

o   Amplitud. Un mercado es amplio cuando existen en él órdenes de compra y venta por encima o por debajo del precio de equilibrio en volumen suficiente. Si un pequeño diferencial en precio significa un cambio importante en el volumen de negociación, el mercado es amplio.

o   Flexibilidad. Un mercado es flexible si ante variaciones de precios, que desequilibran temporalmente las órdenes de compra y de venta, surgen nuevas órdenes que restablecen el equilibrio. Mientras más rápidamente surjan estas nuevas órdenes, más flexible es el mercado. Cuanto más flexible sea un mercado, más suaves son las fluctuaciones de los precios a lo largo del tiempo.

 

C) CLASIFICACIÓN.

 

Ø  Por el grado de transformación de los activos. Los mercados pueden ser directos, sin transformación de activos, e intermediados, con transformación de títulos.

 

Ø  Por la forma de funcionamiento. Sirve para clasificar a los mercados en aquellos de búsqueda directa, de comisionistas o brokers, de mediadores o dealers, y de subasta. El mercado de búsqueda directa existe cuando tanto los compradores como los vendedores de activos buscan por sí mismos la contrapartida sin ayuda de agentes especializados. El mercado de dealers se diferencia de los brokers en que toma posiciones, compra y vende por cuenta propia, y por tanto asume riesgos. Los mercados de subasta son las bolsas de valores, se asegura una formación de precios más uniforme y equitativa.

 

Ø  Por los tipos de activos. El mercado monetario es el de los activos financieros a corto plazo, de reducido riesgo y alta liquidez. El corto plazo es una característica algo elástica, ya que a veces se consideran dentro de este mercado activos de gran liquidez y plazo medio, como bonos bancarios. El mercado monetario cumple un papel desintermediador respecto a los intermediarios financieros bancarios, poniendo en contacto a prestatarios y prestamistas últimos, el Tesoro y el público en general, aunque la banca pueda actuar como comisionista e incluso como dealer.

El mercado de capitales abarca las transacciones de activos financieros a medio y largo plazo, admitiéndose por convención que la frontera entre el corto y el medio y largo plazo se sitúa en el año. A su vez, el mercado de capitales puede serlo de valores tanto de renta fija como variable, bonos, obligaciones, acciones, y de créditos a largo plazo.

 

Ø  Por la fase de negociación. El mercado primario o de emisión y el mercado secundario o de negociación. En el primero se emiten activos de renta fija o variable nuevos, en el segundo se negocian aquellos emitidos en su día en el mercado primario.

 

Ø  Por las operaciones en ellos realizadas. Pueden ser mercados al contado o spot y mercados derivados. En los primeros se negocian operaciones al contado, con entrega inmediata del activo financiero negociable. En los segundos a plazo, pudiendo dividirse en condiciones libremente pactadas por las partes o con unas determinadas condiciones o características.

 

Ø  Por el tipo de moneda. Se distingue los mercados de divisas.

 

Ø  Por el grado de intervención. En un mercado libre, el volumen intercambiado y el precio de los activos se fija por el juego de la oferta y la demanda. En un mercado regulado se altera administrativamente el precio o la cantidad de los títulos negociados.

 

Ø  Por el grado de formalización. Se distingue entre mercado organizado y no organizado. Se llama mercado organizado aquel en que se comercia con muchos títulos de forma simultánea en un solo lugar generalmente y bajo una serie específica de normas y reglamentos. Un mercado no organizado es aquel en que sin consentimiento a una reglamentación estricta, se intercambian activos directamente entre agentes o intermediarios sin necesidad de definir el sitio donde tiene lugar la transacción, ya que ésta puede ser la oficina del agente o intermediario o cualquier otro lugar. Las condiciones de precio y cantidad las fijan, libremente, las partes y no se precisa la intervención de un agente mediador, aunque ésta pueda existir.

 

Ø  Por el grado de concentración. Los mercados centralizados se identifican con los grandes centros financieros internacionales, donde existe una fuerte concentración de la actividad económico-financiera, sea la City de Londres o Wall Street en Nueva York. Mercado financiero no centralizado suele ser aquel donde la gama de servicios ofrecidos es más bien modesta y poco amplia. Así el mercado de los servicios ofertados por los bancos de una ciudad mediana de provincias puede considerarse como no centralizado.

 

JIV